
Hasta hace tres meses no despreciaba hablar por teléfono, pero este simple hecho, se está convirtiendo cada vez en más suplicio para mí. Cuando suena uno de mis teléfonos, el corazón se me acelera y mi nivel de `mala leche´va incrementando a medida que va sonando la musiquita. Es como si unas dosis de concentración muy alta de estrés se apoderaran por un momento de mí. He cambiado los tonos, intentando que suene hasta a músical celestial, pero no hay forma...El colmo llegó ayer cuando al colgar me dí cuenta de que había mantenido a la vez 3 conversaciones diferentes por 3 teléfonos distintos. Uno era mi móvil personal, otro mi móvil de empresa y el último el fijo del trabajo. Yo estaba hablando por éste cuando sonó mi móvil personal, y por los dos cuando sonó el móvil de empresa.
-Un segundo, que me llaman por el otro teléfono
-Un segundo que me está sonando el móvil
Al final saqué las 3 conversaciones, una de papeleo de la universidad, otra para concretar una entrevista para mi programa y por mi teléfono quedé con una amiga para esta misma tarde. Así que me voy porque últimamente ya no soy puntual ni aunque quiera...
1 comentario:
Y por eso es porque lo que no llamas a tus amgigos xD
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