Nunca me han gustado las despedias

Estamos a punto de despedir el 2010...Y lo confieso: nunca me han gustado las despedidas... Éste año he tenido dos. De la primera hablaré en otro post, y de la segunda, supongo que muchos os acordaréis... Y es que después de año y medio trabajando en La 8 de Castilla y León Tv, un nuevo reto profesional llamó a mi puerta. Y cuando el tren pasa, hay que cogerlo, que si no, ya sabéis lo que pasa...Volvía a tener la oportunidad de vivir en mi ciudad, de trabajar en lo que más me gusta, y además, de crecer como profesional. Pero para ello tuve que despedirme de Burgos, de mis compañeros, de mis amistades en la fría capital, y de mi antiguo trabajo. Fueron dos días malísimos, de lágrimas a todas a horas...De tristeza y alegría...De recuerdos y emociones...Y por quñe no, de miedo...

Hoy, después de algo más de dos meses, albergo esa etapa en el lado de los buenos recuerdos, en el que nunca olvidamos, el lado en el que de vez en cuando revolvemos para destapar esas vivencias y recordarlas con cariño...Y hoy, después de algo más de dos meses, me vuelvo a sentir afortunada, ilusionada con nuevas metas y feliz, que al fin y al cabo es lo más importante...Y como buen recuerdo, esta despedida, mi último programa en La 8 CylTv (Gracias a Miguel por colgarlo en su blog, y a todos aquellos que han sido los `culpables´ de que me fuera llorando de esa manera) En el minuto 88 empieza la despedida y mi llorera...

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